Confiamos cada vez más en la sanidad privada
La contratación de seguros de salud privados crece un 8% durante los años de pandemia en un sector que debe afrontar nuevos retos como la digitalización.
Nos preocupa, y mucho, la salud. La pandemia ha acelerado la contratación de seguros de salud privados. Las pólizas crecieron en un 8% entre finales del 2019 y diciembre del 2021, lo que significa que alrededor de 1,3 millones de personas apostaron por la sanidad privada, según se desprende del último informe de ICEA, “El seguro de salud a diciembre de 2021”.
En estos dos años, el sector ha afrontado enormes retos como la atención a las personas con covid-19 a pesar de que algunas pólizas excluían las pandemias, lo que ha contribuido a posicionarse como un buen aliado para los ciudadanos y ha favorecido aún más la contratación. También se han acelerado tendencias derivadas de la digitalización y las nuevas tecnologías: las aseguradoras han apostado por la telemedicina como una propuesta diferenciadora y se han realizado más contrataciones online.
La crisis del coronavirus ha alterado los hábitos de vida de los asegurados y el cuidado de la salud ha pasado a situarse en todo el planeta como una de las preocupaciones más relevantes
Los seguros de salud privados han experimentado un aumento constante en las últimas décadas y hoy uno de cada cuatro ciudadanos cuenta con uno. Según el estudio “Seguros y fondos de pensiones”, del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, al cierre del 2020 operaban en el ramo de salud 93 entidades aseguradoras que cerraron el ejercicio con un volumen de facturación de 9.255 millones de euros. El informe destaca el aumento del 4,41% de primas respecto a 2019 y lo atribuye a la pandemia, pero también a “la mayor predisposición de los consumidores a estar cada vez más cubiertos y protegidos en aspectos de salud”. Además, según ICEA, la falta de acceso a la atención primaria que se produjo en 2021 a causa de la pandemia, sumado al aumento de las listas de espera, han convencido a la ciudadanía de la necesidad de contratar seguros privados de salud. En estos momentos, en los hospitales privados ya se realizan el 37% de las intervenciones quirúrgicas, se ven el 30% de urgencias y se atienden el 26% de las consultas de la sanidad española. Además, el sector emplea actualmente a 360.000 profesionales, en 458 hospitales, que suponen el 58% del total disponible en el país y tiene el 32% de las camas.
Otro motivo del crecimiento de este tipo de seguros ha sido la iniciativa de las entidades aseguradoras para proteger a los profesionales sanitarios y de las residencias que trabajaban en la lucha directa contra el covid-19, creando un fondo solidario para darles cobertura. También ha aumentado la contratación de planes colectivos por parte de empresas pequeñas y medianas, algo inusual hasta ahora en el caso de las pymes, que se han dado cuenta de que ofrecer a sus empleados una póliza de salud es una buena forma de fidelización y una herramienta para retener talento. Lo constata un estudio de la plataforma digital Cobee, que indica que el 62% de los empleados manifiesta su preferencia por disponer de una póliza que le proporcione cobertura sanitaria.
Mayor ahorro
Tanto es así que el seguro privado ya supone el 7% de las prestaciones totales de salud. Con datos del 2019, la patronal UNESPA calcula que el sistema público supone aproximadamente el 71% del gasto total en salud, a lo que debe sumarse un 22% que asumen las familias por prestaciones que no están cubiertas por la sanidad pública, como las gafas, por ejemplo. Además, según el documento “Sanidad privada, aportando valor: Análisis de situación 2021”, elaborado por el Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad, de la Fundación Idis, se estima que el ahorro generado por el seguro privado estaría entre 506 euros, si se utiliza la sanidad pública y la privada, y 1.368 euros año, en el caso de que el paciente utilice solo la sanidad privada.
Los autores del informe del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital aseguran en su estudio que “la crisis del coronavirus ha alterado los hábitos de vida de los asegurados en muchos aspectos y el cuidado de la salud ha pasado a situarse en todo el planeta como una de las preocupaciones más relevantes”. Además, las medidas de distanciamiento social han implicado para las empresas de seguros de salud la instauración de “nuevas medidas y la búsqueda de soluciones digitales para continuar prestando sus servicios sanitarios a través de nuevas herramientas como la videoconsulta y la telemedicina”. De hecho, los expertos aseguran que la pandemia ha sido un “verdadero catalizador para la telemedicina”, y las empresas del ecosistema sanitario han puesto el foco “más que nunca en la transformación de su modelo de negocio hacia uno más orientado a la salud preventiva y más eficiente a través de la tecnología”. Antes de la pandemia ya había aseguradoras que ofrecían seguros digitales, pero no ha sido hasta 2020 y 2021 que se han normalizado en la sociedad.
Por provincias
Madrid y Barcelona son las provincias que lideran la contratación de seguros privados, seguidas de Valencia, Sevilla y Málaga, según los datos del informe “El seguro de salud en el año 2020” de UNESPA. Y por edades, las personas de 41 a 50 años son los que más seguros de salud tienen, un 21,38% del total.
Comparados con Europa, España sigue en el tramo medio del listado en cuanto a adopción de seguros privados, según datos de Eurostat. Concretamente ocupa el puesto número 15 después de Chipre y antes de la República Checa, pero bastante lejos de países donde estas coberturas están muy generalizadas, como Países Bajos, Bélgica, Eslovenia y Francia, con tasas superiores al 75%.
Tipos de seguros
De asistencia sanitaria. Facilitan, a cambio del pago del precio del seguro, acceso a un conjunto cerrado de servicios sanitarios sin más coste que el propio pago, según la patronal UNESPA.
De reembolso de gastos médicos. Incluyen la posibilidad de que el asegurado haga uso del servicio sanitario de su elección y, entonces, el asegurador le reembolse un porcentaje de dicho pago.
De subsidios. Indemniza al asegurado en el caso de que deba estar de baja por enfermedad, hospitalización o causa relacionada con la salud.