Las claves para identificar la gripe
En invierno, los casos de gripe se disparan, por lo que es importante reconocer sus síntomas y aprender a diferenciarlos de otros virus.
El invierno es sinónimo de fiestas y reuniones familiares, pero también de resfriados, congestión y del típico vaso de agua con limón y miel. Durante esta época, las campañas de vacunación contra la gripe se disparan para prevenir contagios, especialmente entre los grupos más vulnerables.
No todos los virus de la influenza generan los mismos síntomas ni todos los cuerpos reaccionan igual ante ellos. En muchos casos, algunos signos pueden confundirse con un resfriado común o incluso con el COVID-19. Por eso, es fundamental saber identificar la gripe y cómo prevenir los contagios durante estos meses.
Qué es la gripe y sus tipos
La gripe es una enfermedad respiratoria muy contagiosa causada por virus gripales. Afecta principalmente a la nariz, la garganta, los bronquios y, ocasionalmente, a los pulmones. Según un estudio realizado por el Instituto de Salud Carlos III, la influenza provocó aproximadamente 33.000 hospitalizaciones y 1.800 fallecimientos entre septiembre de 2024 y mayo de 2025.
Existen tres variantes de la influenza que afectan a los humanos: A, B y C. Los de tipo A pueden causar pandemias, mientras que los de tipo B solo provocan epidemias estacionales. Por otra parte, la influenza C solo causa infecciones leves y no hay evidencia de que formen propagaciones masivas.
¿Cómo identificar la gripe frente al resfriado y el COVID-19?
A menudo es complicado reconocer la gripe del resfriado común y del COVID-19. Eso es debido a que comparten muchos de los síntomas. Sin embargo, existen algunos signos que pueden ayudar a identificarlos.
Los síntomas del resfriado común suelen ser más leves y desaparecen a los pocos días de reposo. Esta condición va acompañada de secreciones nasales, tos, congestión y dolor de garganta. Rara vez provoca fiebre o dolores intensos como la gripe.
Por otro lado, distinguir la influenza del COVID-19 puede ser más difícil. Ambos virus se contagian de manera similar y comparten síntomas. Según publica el National Insitute on Aging, el COVID-19 provoca un cambio o la pérdida del gusto o del olfato que no suele aparecer con la gripe. Aun así, solo con una prueba puede confirmarse qué tipo de infección se trata.
Los síntomas de la gripe
Los síntomas de los virus de la influenza suelen comenzar dos días después del contagio. Estos son los cinco signos más comunes:
- Fiebre, aunque no siempre se presenta en todos los casos.
- Tos y dolor de garganta.
- Moqueo o congestión nasal.
- Dolor de cabeza, muscular y de las articulaciones.
- Fatiga.
En algunos casos, también pueden presentarse otros síntomas como escalofríos, náuseas, vómitos y diarrea.
¿Cómo evitar contagios?
El frío, la humedad y los espacios cerrados son el ambiente ideal de transmisión de virus. Para reducir el riesgo de contagios durante estos meses, es importante:
- Cubrir la boca y la nariz al toser o estornudar.
- Utilizar pañuelos desechables.
- Ventilar las habitaciones cerradas.
- Lavarse las manos con frecuencia.
- Vacunarse si formas parte de los grupos vulnerables.
En la mayoría de los casos, la gripe no suele causar complicaciones graves. El descanso, junto con la medicación, suele ser suficiente para que los síntomas mejoren.
En los casos leves, se recomienda beber mucho líquido, mantener una buena higiene y ventilar los espacios cerrados. Por otra parte, si los síntomas empeoran, hay que acudir a un profesional de la salud lo más rápido posible.