“En el 80% de los niños con asma, la principal causa es la alergia”
Entrevistamos la doctora M. Carmen García Avilés, experta en enfermedades alérgicas, para conocer en profundidad en qué consisten y cómo actuar frente a ellas.
La prevalencia de las alergias va en aumento, sobre todo en los países desarrollados. ¿Por qué?
Ciertamente, existe un incremento progresivo de padecer una enfermedad alérgica más o menos grave. Esto puede ser debido a factores genéticos, pero sobre todo a factores ambientales que favorecen el desarrollo de estas patologías: el estilo de vida, la alimentación y la contaminación ambiental, entre otros.
¿Cuáles son las alergias más comunes en España?
Según los últimos datos recogidos los motivos de consulta más frecuentes en consultas de alergología fueron la rinitis alérgica (54%), el asma bronquial (23%) y la alergia a los medicamentos (17%). En algunas ocasiones, los síntomas de alergia pueden solaparse y no distinguirse de otras enfermedades no alérgicas, y pueden generar duda en los pacientes y en el propio especialista. Por ello, es muy importante la realización de una buena historia clínica para detectar la frecuencia y duración de los síntomas, posibles alérgenos desencadenantes de los síntomas, antecedentes personales y familiares de atopia, respuesta a los tratamientos administrados hasta el momento, etc.
¿Todas las alergias se manifiestan igual?
La enfermedad alérgica puede empezar en cualquier momento de la vida y tomar distintas formas. Puede afectar a las vías respiratorias ocasionando rinoconjuntivitis y asma bronquial, o a la piel produciendo dermatitis atópica, dermatitis de contacto alérgica, urticaria o angioedema. También hay alergias que afectan al aparato digestivo, y, cuando afecta a más de dos órganos o sistemas, ocasionan el cuadro más grave, llamado anafilaxia. Los alérgenos responsables de estos síntomas también son muy variados.
¿Cuáles de estas alergias son más complejas a la hora de tratar?
Desde mi punto de vista, el cuadro más grave en lo que se refiere a reacciones inmediatas, que son aquellas producidas tras pocos minutos de exponerse al alérgeno, es la anafilaxia o choque anafiláctico a un alimento, medicamento o picadura de himenóptero. Se trata de reacciones impredecibles y que aparecen súbitamente, sin previo aviso.
¿Cómo se tratan las alergias?
Lo más importante en una enfermedad alérgica es identificar el agente causante de dichos síntomas para evitarlo en su totalidad. Pero esto no es siempre posible llevarlo a cabo y es cuando hay que realizar un tratamiento sintomático, bien en el momento puntual de la reacción, bien durante un periodo de tiempo más prolongado. En casos muy concretos puede llevarse a cabo una desensibilización a un alimento o medicamento, que consiste en la administración progresiva del alérgeno para alcanzar una tolerancia al mismo. También existen terapias más novedosas como los fármacos biológicos que pueden ser útiles para enfermedades como el asma grave, la urticaria crónica y la dermatitis atópica.
¿Cómo han avanzado las técnicas de diagnóstico?
El diagnóstico de las enfermedades alérgicas mediante una prueba cutánea sobre la piel del paciente se remonta a 1873. En los últimos años se han impulsado nuevas técnicas de diagnóstico in vitro que no ponen en peligro al paciente; la más conocida es la determinación de IgE antígeno específica, cuantificando el grado de alergia de un individuo.
¿La tecnología tiene un papel importante en las consultas de los alergólogos?
La tecnología y la salud han ido creciendo y avanzando juntas para facilitarnos, cada vez más, la vida. El desarrollo de la tecnología ha ayudado a la creación de nuevos fármacos y tratamientos, mejorando investigaciones médicas y simplificando procesos. La tecnología es importante en la medicina no solo por el desarrollo de este tipo de herramientas sino también por los beneficios que trae consigo, como el aumento de la accesibilidad a la asistencia médica.
¿Se pueden prevenir las alergias con componentes genéticos?
Las enfermedades alérgicas tienen un claro componente hereditario. Varios estudios han confirmado que los hijos de padres con enfermedad alérgica (alimentaria, asma, rinitis alérgica o eccema) tienen un mayor riesgo a padecer este tipo de enfermedades. Esta predisposición debe verse favorecida por factores ambientales que decanten la balanza hacia tolerancia o hacia la alergia. En Estados Unidos, en los últimos años, se han llevado a cabo varios estudios con niños que tienen un riesgo alto de sufrir alergia al cacahuete en los que se ha intentado implementar medidas para prevenir esa alergia; aunque pueda resultar llamativo, exponer a estos niños al cacahuete puede tener un efecto favorable para el desarrollo de tolerancia al alimento.
¿Cómo deben afrontar la primavera los alérgicos?
Una vez que el paciente sabe que tiene alergia a un determinado polen, las medidas preventivas suelen ser eficaces. Además, las personas deben ser previsoras y tener siempre a mano los medicamentos recomendados por el alergólogo, tanto preventivos como sintomáticos.
¿Qué medidas o hábitos pueden ayudar a un alérgico a suavizar sus síntomas?
Hay varias medidas para minimizar los efectos nocivos del polen en primavera, como evitar salir a la calle en horas de mayor concentración de polen, mantener las ventanas cerradas o utilizar gafas de sol para proteger los ojos del polen. También se recomienda tender la ropa en el interior de casa y, si se utiliza el coche, hacerlo siempre con las ventanillas subidas.
¿La contaminación puede predisponer a una persona a sufrir un ataque de alergia?
Las partículas eliminadas en la combustión de los motores diésel y calefacciones en las ciudades crean un entorno desfavorable en las plantas, que para defenderse producen proteínas de estrés que hacen más agresivos a los pólenes, con mayor potencial de alergenicidad. Además, los altos niveles de contaminación urbana impiden a los pólenes abandonar la atmósfera generando una “nube alergénica”, lo que aumenta el tiempo de exposición sobre zonas urbanas.
El asma es una de las enfermedades más frecuentes en las consultas de los alergólogos del país.
El asma es una enfermedad originada por la relación entre factores genéticos y factores ambientales. Una gran cantidad de estímulos ambientales pueden ser la causa de asma o desencadenar una crisis. Entre los factores de riesgo está el componente hereditario o la atopia (predisposición a padecer enfermedades como rinitis, conjuntivitis o dermatitis atópica). Entre los factores desencadenantes hay las infecciones víricas de la vía respiratoria superior o la inhalación de altas concentraciones de aeroalérgenos. También pueden desencadenar una crisis de asma algunos medicamentos, el ejercicio físico, el aire frío, la contaminación ambiental, el humo del tabaco o el estrés, entre otros.
Entonces, ¿qué relación hay entre asma y alergia?
En más de la mitad de las personas adultas con asma y en el 80% de los niños, la principal causa de asma bronquial es la alergia. La alergia puede causar asma bronquial en algunas personas, pero no todo el mundo que padece una alergia desarrolla asma bronquial.
M. Carmen García Avilés es licenciada en Medicina por la Universidad de Alicante. Es especialista en alergología e inmunología clínica y miembro del Comité de Alergia a Medicamentos de la SEAIC. Actualmente trabaja en el Hospital HLA Universitario Moncloa.