
Una vacuna contra el cáncer de riñón que evita su reproducción
Un ensayo clínico ha logrado que nueve pacientes con cáncer de riñón avanzado no hayan sufrido recaídas casi tres años después del tratamiento.
Un ensayo clínico con una vacuna oncológica personalizada ha logrado que nueve pacientes con cáncer de riñón avanzado y alto riesgo de recurrencia no hayan sufrido recaídas casi tres años después del tratamiento.
La investigación, liderada por el Instituto Oncológico Dana-Farber (EE. UU.) y publicada en Nature, ha demostrado que la vacuna genera respuestas inmunitarias duraderas, manteniéndose activas una media de 34,7 meses tras la administración. Los resultados refuerzan el potencial de esta estrategia para prevenir la reaparición del cáncer tras la cirugía.
La vacuna utiliza neoantígenos, proteínas mutantes específicas de las células tumorales, para entrenar al sistema inmunitario y atacar únicamente las células cancerosas. Tras la extirpación del tumor, los investigadores personalizan cada vacuna analizando el tejido tumoral del paciente y empleando algoritmos predictivos para seleccionar los neoantígenos con mayor probabilidad de inducir una respuesta inmune. En apenas tres semanas, la vacuna multiplica por 166 el número de células T específicas contra el tumor, logrando una protección sostenida.
Esta terapia, previamente probada con éxito en el melanoma, ha demostrado ser eficaz también en el cáncer de riñón, a pesar de que estos tumores presentan menos mutaciones. Todos los participantes en el estudio padecían carcinoma de células renales de células claras en estadio III o IV, y la vacuna logró una respuesta inmunitaria potente que podría marcar un avance clave en la lucha contra este tipo de cáncer. Estos hallazgos, por tanto, abren la puerta a nuevas estrategias de inmunoterapia adaptadas a cada paciente.