La hipertensión, un “asesino silencioso”
9,4 millones de personas mueren en el mundo por complicaciones derivadas de la hipertensión, un trastorno que generalmente no muestra síntomas en los primeros años.
La mayoría de las personas que sufren hipertensión no tienen síntomas, pero la tensión arterial elevada causa aproximadamente la mitad de todas las muertes por accidente cerebrovascular o cardiopatía en el mundo, según la Organización Mundial de la Salud. En España, la hipertensión es una patología muy extendida: el 42,6% de la población española la sufre y el 37,4% está sin diagnosticar, indica el estudio “Di@bet.es” publicado en la Revista Española de Cardiología.
La hipertensión se da cuando los niveles de presión arterial son altos de forma continua o sostenida. Si no se controla, puede provocar una pérdida de elasticidad de las arterias, hipertrofia y dilatación del corazón, accidentes cerebrovasculares y daños renales u oculares. En el 95% de los casos se desconoce el origen de la hipertensión llamada primaria o esencial, y en un porcentaje bajo de casos la provoca otra enfermedad.
Una persona puede ser hipertensa sin saberlo, de ahí la importancia de hacerse controles, especialmente a partir de los 40 o 45 años. En muchos casos la hipertensión se diagnostica cuando aún no hay síntomas y muchos pacientes descuidan el tratamiento. Una dieta equilibrada, ejercicio diario y controles periódicos pueden ayudarnos a mantener la tensión bajo control. También abandonar el tabaco, limitar el alcohol y gestionar de forma saludable el estrés. •