
Diálisis: cómo adaptar tu vida tras el diagnóstico de insuficiencia renal
¿Qué implica el tratamiento con diálisis? Te explicamos en qué consiste y cómo vivir con una enfermedad crónica como la insuficiencia renal.
La insuficiencia renal crónica (IRC) es el deterioro progresivo e irreversible de la función renal. Dicho de otro modo, los riñones dejan de funcionar hasta el punto de necesitar ayuda externa, por ejemplo, con diálisis. Unos niveles altos de creatinina y urea en sangre son indicadores de que los riñones no están eliminando toxinas debidamente. Estas alteraciones en las analíticas, junto con una disminución del volumen de orina, pueden evidenciar una IRC. En España, esta enfermedad afecta a 50.000 personas.
Las principales causas de IRC son la diabetes y la hipertensión arterial, ya que cuando hay un mal control de las mismas disminuye la capacidad de filtrado de los riñones.
¿Cuándo es necesaria la diálisis?
La diálisis es un procedimiento que se usa como tratamiento para personas con fallo renal, es decir, con enfermedad renal en etapa terminal. Según la American Kidney Fund, este tratamiento tiene la función de depurar la sangre eliminando los desechos y el exceso de líquido.
Vivir con insuficiencia renal
El diagnóstico de una enfermedad crónica como la IRC puede generar tristeza, miedo, rabia, lo cual es frecuente en un inicio. En algunos casos puede llegar a provocar situaciones de estrés, ansiedad y depresión. Por todo ello, es muy importante contar con un acompañamiento adecuado por parte del equipo médico que ayude a transitar la aceptación del diagnóstico.
Recibir el diagnóstico en estadios precoces de la enfermedad es crucial para poder actuar debidamente y retrasar al máximo el fallo de los riñones.
Consejos para afrontar el diagnóstico
En definitiva, recibir un diagnóstico de insuficiencia renal crónica suele ser complicado, especialmente cuando el daño renal es grave y requiere un tratamiento como la diálisis. Una vez se inicia la diálisis, hay que seguir este procedimiento de por vida, a no ser que se someta a un trasplante de riñón.