Ocho de cada diez ictus podrían evitarse mejorando los hábitos de vida
Según la SEN, el estilo de vida sería la clave para evitar problemas cardiovasculares graves. Entre las principales recomendaciones, está abandonar el consumo de tabaco o controlar la tensión arterial.
Una de cada cuatro personas está destinada a sufrir un ictus a lo largo de su vida. Es la primera causa de muerte en mujeres y la segunda en hombres, según los datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN), además de ser la primera causa de discapacidad en ambos sexos en la etapa adulta. De los supervivientes, un 30% se convierte en dependiente funcional a raíz de las secuelas.
En España las cifras son bastante alarmantes: más de cien mil personas sufren un ictus al año. Es una incidencia que se ha duplicado en los últimos 30 años y se calcula que seguirá ascendiente. De hecho, a escala mundial, se espera que el número aumente hasta casi 10 millones de personas para 2050, tal como explica un estudio publicado por The Lancet Neurology.
La importancia de mejorar los hábitos
Pero no todo son malas noticias. Tal como explica la SEN, más del 80% de los casos de ictus podrían evitarse cambiando pequeños hábitos. Abandonar el consumo de tabaco, limitar el del alcohol, controlar el peso, hacer ejercicio y reducir la sal serían los principales consejos, junto a controlar la tensión arterial, los niveles de colesterol y el azúcar de forma frecuente, sobre todo a partir de los sesenta años.
También es importante recordar que una rehabilitación a tiempo es esencial para recuperar la autonomía en los tres primeros meses, por lo que conocer la forma en la que actúa el ictus es también un factor clave para acudir lo antes posible a un hospital en caso de sufrirlo.
Por ello, la SEN recuerda que los síntomas principales que pueden alertar a una persona en los primeros momentos de estar padeciendo esta afección son: dolor de cabeza, problemas de visión en uno o ambos ojos, pérdida de equilibrio o de fuerza, sensibilidad en las extremidades y dificultad para hablar y/o comprender. Además, añaden, suelen aparecer de forma repentina.